Las blancas paredes de mármol sangran silenciosas,
y dedos de verdor hieren su piel perfecta y brillante.
El Ángel extiende una suave sombra
sobre las siempre rientes frentes de los bienaventurados.
La boca de Myriam se quiebra, y sus manos temblorosas acarician sus
pechos
Todo es silencio.
Hasta que el grito del dios parte el obelisco,
que cae en mil pedazos y escribe una letra en el aire.
La letra de mi nombre de mi amada.
En su beso oscuro he visto surgir la risa de fiera de quien siempre
acecha,
Y ahora, en lugar del obelisco,
está naciendo un árbol lleno de nudos, un olivo inocente.
Es hora de despertar.
Dí mi nombre.
Es hora de despertar.
.
19 comentarios:
Muy bueno Dhavar.
saludos
José:
Gracias. Me alegro de que te guste.
Me encanta.
....esto.....ejem.....bueno, vale
Ignacio:
Ya, pero si no... ya sabes que..uf.
Verónica:
Claro que sí, hombre!
Dhavar excelente como siempre.
Saludos
Caballero:
Gracias. ¿Te veré en la fiesta de Caco?
¿Es la segunda vez que se lo preguntas?
Mary:
Creo que no, que es la primera, epro quizá no.(Comienzo claro de Alzheimer)
soy mayor que tu... será el mío :))
si todo va como parece (auqnue como dijo aquel "qué sabe nadie") yo sí iré a la merendilla... espero darte una camiseta y un cartel para Screamo, aunque nos tiene abandonadas a sus fans :)
Sin comentarios .....
Simplemente IDEAL.
Saludos.
Mary:
Screamo está de exámenes, tratando de recuperar y entrar en la Univ. en septiembre.Pero algo sí irá poniendo.
Valquiria:
Comentarios como el tuyo hacen el día.
Saludos
Despertar a través del nombre, del nombrado, del que conoce y nombra.
Luis:
Exacto.
Dhavar, ya sabes que soy "fan" tuya;
este poema tuyo es precioso...escribe más por favor.
Anonimo:
No adivino quién eres.Pero no te descubras.Para el ego es mejor así.
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